viernes, 14 de diciembre de 2007

A Sus Ordenes Mi Teniente


El mayor defecto de los hombres es el creer que están en posesión de la sabiduría. Así se pasan el día solucionándote la vida. Ser mujer a lo largo de una jornada en la que convivas con hombres es como unas maniobras de supervivencia. Desde por la mañana, en el desayuno, que el primer hombre del día, me clava; “No irás así a trabajar”, y yo sorprendida, y no sé muy bien si por su actitud o por preguntarme qué es lo que le sucede a mi atuendo. En el garaje me recomiendan que no debiera salir con esa rueda tan desinflada, claro como que voy a la gasolinera a darle aire; y yo solita. Llego al trabajo y el conserje insinúa si me hace las fotocopias, pues no, yo sé manejar la fotocopiadora, hasta ahí podíamos llegar, me voy a tomar café, el camarero intenta aconsejarme sobre mi i-Pod; el móvil, es mi exmarido, que si esa marca de coche que he elegido para reemplazar al viejo, no es acertada, (me gustaría a mí decirle lo que no es acertado, pero tengo a media plantilla laboral, mirando mis muecas). Se ha comprado una revista de coches, la que compré yo la semana pasada. Que me compre un BMW será hortera el hombre.

¡Dios dame fuerzas!. Me llama un ex, ¡que no!, que ya sé yo lo que tengo que hacer, que te lo agradezco, pero no. Después me llama mi amigo M., que es buena idea irme al sur una semana, que me vaya, pero caramba que manía, si ya sé yo que me puedo ir, y ya veré yo cuando me quiero ir. El teléfono otra vez, será mi novio, que me mueve los fondos de pensiones a una cuenta, pero que no , que vale, que vale, pero si yo no tengo dinero.¡ Uf colgué!. Me voy a duchar y a dormir. Otra vez el teléfono...

¿Por qué los hombres no escuchan? Son incapaces. Ellos sólo actúan. Llamas a un hombre, le cuentas algo, y ¡hala! te lo soluciona. Pero si sólo quería hablar, o sólo quería que me escuchases. La inmensa mayoría de las veces las mujeres necesitamos sólo verbalizar lo que pensamos o sentimos. Que alguien nos escuche. No queremos soluciones, y menos las que proponen. No es que los hombres sean perfectos, es que se creen perfectos. No es que los hombres sean superiores, es que se creen superiores. Tendrán una nueva hormona aún por descubrir que les reafirma por las mañanas la Autoestima. Yo personalmente prefería la época en que les reafirmaba su potencia sexual. Los tiempos están cambiando amigas mías. ¿Y vosotras que preferís?
Besos Sumisos.

4 comentarios:

Desesperada dijo...

qué razón tienes, parece que en cuanto les cuentas algo es porque les pides ayuda! de verdad que es desesperante. a mí sabes con qué me pasa? con la informática, controlo bastante y soy una fanática de todos los artilugios electrónicos... pues hija, cuando voy a comprar me hablan como si fuese retrasada mental, me pone de los nervios. siempre termino diciendo al vendedor de turno: mira, soy una tía pero sé encender el ordenador!!!

winfried dijo...

Oye tampoco nos caigas a nosotros los hombres asi de jodido. Que no somos tan malos. Mi esposa dice que yo no presto atencion tampoco a lo que dice, es que me dice todo tan rapido y tanto que tendria que ser grabadora para recordarme lo que me dice. Al menos ella sabe que hay amor entre los dos, y que no soy perfecto. A lo mejor no deberias tomar las cosas tan apecho y haz como Desee, hablales de vuelta, las cosas que no te gusten que te esten haciendo, a lo mejor ellos no lo estan haciendo de mala fe, danos una oportunidad...

dousmars dijo...

Winfried pienso como tú. No pienso daros sólo una oportunidad sino cien. Hasta que lo consiga no paro,Jajajaja, soy yo buena para eso.Y ni que decir tiene que a pesar de los pesares, me pareceis unos bichitos raros pero adorables.

Pienso colonizaros a casi todos los que esten libres. Jajajaja

winfried dijo...

jajajaja bueno chevere!!

Nos vemos pronto tambien tienes un blog muy bueno!

Saludos